Retrocedió hacia las habitaciones con sigilo, pero las maderas vetustas lo traicionaron. Esperó. Lo otro también acechaba.
Ramón dejó de percibir la otra presencia -fuera hombre o bestia- de un instante al siguiente. Se quedó con toda la prevención contenida, ignorando qué hacer con ella. Sin que interviniera su voluntad, regresó a la habitación. Se vistió y salió tan silenciosamente como había entrado, con las botas en la mano para no despertar a la abuela. Recién se las puso en la calle.
A pesar del calor y del peso centuplicado de cada movimiento, avanzó tal lo deseara un rato atrás: igual a un río henchido por las lluvias. Se deslizaba por el medio de la calle y sus pasos evitaron, por mera intuición, cualquier piedra o huella que hubiese cambiado el ritmo de la carrera. Llegó a la casa de Medina.
Previendo el ataque de ese perro con alma de lobo al que Medina había bautizado Pilincho, Ramón caminó con cuidado. Estaba dispuesto a evitar cualquier encuentro violento. Mas el perro no apareció. "Se habrá ido de parranda", pensó Ramón.
Una raja de luz se filtraba por la ventana: una vela. Entró al terreno. Curiosamente, sus pisadas rebotaron contra la pared espesa del silencio.
Medina abrió la puerta de un tirón. Lo apuntaba.
-¡Gurí! -gritó Ramó.
Ya a la luz lo vio completamente armado.
-El Pilincho -dijo Medina mientras le alcanzaba un M36 y una PP súper-. Se lo cobró hace un rato. Lo que habrás tardado en llegar. Mi perro por el suyo. No sé cómo no te tropezaste con él. Salgamos por atrás. Pero algo es seguro: o el otro o yo, alguien cae.
El frente de tormenta avanzó con ellos y alcanzaron el límite de la selva bajo las chispas de los relámpagos.
Esperaron para aquietar la respiración. Casi no se veían, pero estaban seguros de que las miradas les brillaban en la oscuridad, como cuando –según la leyenda- en los eclipses los yaguaretés se tragan el sol por un rato.
Sin consultarse, tomaron la dirección del sobrado inutilizado con gasoil.
ZORRITO
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Martha, la veterinaria del pueblo, cierto día se vio en la obligación de
viajar a la
ciudad para comprar varios artículos que necesitaba en su con...
Hace 1 año
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